Conocí a Waffles Do, detrás de Multicentro Sirena, en la avenida Winston Churchill.
Lo vi en Instagram en horas de la mañana un martes de febrero de 2024 y le escribí a mi “voz de la conciencia” para que vayamos luego del trabajo. Por supuesto que aceptó.
A las 5:00 de la tarde estábamos sentadas ordenando nuestros waffles belgas que acompañamos con una sangría blanca y un aperol spritz, demasiados refrescantes, bajo alcohol, con bastante hielo y frutas picadas.
Ordené un “choco madness” por RD$365, que consiste en nutella, crema batida, oreo de chocolate y M&M. El otro fue “mucho queso”, por RD$335, con cream cheese y queso gouda.
Las porciones son enormes, generosas y satisfacen. El precio lo vale. De hecho, las porciones son parecidas a un postre como cheesecake o una lava cake. Tenían el equilibrio perfecto entre lo dulce, lo salado y una masa crujiente.
La masa se siente fresca y suave, creo que la demora de unos 10 minutos fue porque la estaban haciendo ahí mismo. Hay para los amantes de los postres o para los predilectos de platos salados.
Debo dejar plasmado aquí en La Destilería que cuentan con un menú de desayuno y de brunch, por lo que quedé con ganas de ir.
¿Vamos juntos?
Confort
El lugar es pequeño y colorido. Las mesas son hasta para 4 o 6 personas, ideal para ir en grupos. El local no cuenta con baños y cierra justo a las 7:00 de la noche.
El personal te da todo el espacio y tiempo que necesites para decidir qué ordenar. No brindan sugerencias, por lo que debes ir muy decidido.
En sus instalaciones cuentan con una minúscula terraza para comensales de dos, pero se comparte con el parqueo improvisado y que obstruye el paso de los peatones.
Te recalcamos desde La Destilería que los precios plasmados en el menú no cuentan con el itbis ni el 10% de la propina legal, por lo que debes considerar “extender” o “estericar” esos chelitos para agregar la tasa impositiva.
La cuenta nos hizo como RD$ 2,000.
Me sorprendí de que varios deliverys y servicios de comida a domicilio acudieron al lugar, comprar y retirar… O sea, también es una opción para degustar desde el trabajo o la casa, sin tener que trasladarse a la sucursal.
A las 7:00 de la noche ya estaba oscureciendo y mi amiga y yo nos fuimos caminando hasta la avenida y en ningún momento nos sentimos inseguras. Caminamos a paso moderado, en la acera y siempre con la luz pública.
Lo definiría como un lugar pequeño, tranquilo y lleno de vida, donde puedes compartir con amigos un postre.
¿Ya fuiste? De ser así, ¿Cuáles otros waffles nos recomiendas probar?